Dan La Botz//
Hace unos meses, el movimiento Make America Great Again (MAGA) del presidente Donald Trump parecía ser un monolito sólido, desde los legisladores del Partido Republicano en la cima hasta los activistas de base.
Hoy en día, el MAGA está desgarrado por las rivalidades personales y la incompetencia cada vez más visible de los miembros del gabinete. El caso más famoso es el del multimillonario Elon Musk que, hace unos meses, parecía ser prácticamente un copresidente. Rompió con Trump y luego criticó su «magnífico» proyecto de ley fiscal, calificándolo de «abominación repugnante» debido a su incapacidad para hacer recortes mayores.
Musk lanzó entonces un nuevo partido político, el “Partido de América” (America Party). Según una encuesta de Quantus, el partido de Musk tendría el apoyo del 40% de los votantes estadounidenses y del 57% de los votantes republicanos, especialmente entre los hombres. Si el nuevo partido está operativo para noviembre de 2026, podría dividir a los republicanos y amenazar el control de Trump sobre el Senado y la Cámara de Representantes.
Amigos poco recomendables
Luego está el caso de Jeffrey Epstein, el banquero y corredor de bolsa que se decía a sí mismo «el mejor amigo de Trump durante diez años». Condenado en Florida por proxenetismo y tráfico sexual de niños, y luego por tráfico sexual de menores en Florida y Nueva York, Epstein se habría suicidado en prisión el 20 de agosto de 2019, aunque algunos creen que fue asesinado. Su cómplice, Ghislaine Maxwell, fue condenada a 20 años de prisión.
Los conspiranoicos de derecha han exigido que se hagan públicos los expedientes del Departamento de Justicia sobre Epstein, así como la lista de sus clientes. Llevan años afirmando que Epstein, miembros de la élite económica, el «Estado Profundo» y los líderes del Partido Demócrata estaban involucrados en un culto pedófilo.
La ministra de Justicia de Trump, Pam Bondi, dijo primero que tenía la lista. Ahora afirma que no hay ninguna en los archivos. Por tanto, los partidarios de MAGA están furiosos con Trump y Bondi, algunos afirman que Trump ahora forma parte del “Estado Profundo”.
De desastres sanitarios a fracasos políticos
Los fracasos del gabinete también amenazan con socavar la unidad del MAGA y de los republicanos. El secretario de Salud, Robert Kennedy, escéptico sobre las vacunas, no logra evitar la propagación del sarampión y ha perdido todo apoyo.
Más recientemente, la gestión de las inundaciones en el centro de Texas por parte de la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, también fue un fracaso y una tragedia humana que debilita a Trump.
Los desbordamientos del río Guadalupe, que comenzaron el 4 de julio, provocaron en 45 minutos un muro de agua de 8 metros de altura. ¿Resultado? 129 muertos y 170 desaparecidos, entre ellos una veintena de niñas que participaban en un campamento de verano. Kristi Noem, directora de la Agencia Federal de Gestión de Emergencias (FEMA), que gasta miles de millones en asistencias en situaciones de emergencia, ha emitido una nueva directiva que requiere su aprobación personal para cualquier gasto superior a 100.000 dólares, paralizando prácticamente la FEMA. También retrasó tres días el despliegue de los equipos de búsqueda y rescate de la FEMA en el lugar de la inundación. Trump felicitó a K. Noem por aparecer inmediatamente en la televisión y la apoyó a pesar de su incapacidad para reaccionar rápidamente ante la situación.
Mantener la resistencia para hacer retroceder a Trump y su mundo
Por último, las políticas de inmigración de Trump están perdiendo popularidad. Durante varios meses, las y los estadounidenses han visto a los agentes arrestar a los trabajadores y separar a las familias. La semana pasada se produjeron redadas de tipo militar en McArthur Park, Los Ángeles, y en granjas locales, con vehículos blindados y agentes a caballo, agentes equipados con armamento militar, utilizando granadas ensordecedoras y gases lacrimógenos.
La comunidad ha organizado una manifestación masiva, y el apoyo del público a estas políticas está disminuyendo. La última encuesta de Gallup muestra que un porcentaje récord del 79% de los estadounidenses considera que la inmigración es buena para el país, mientras que el apoyo al muro fronterizo con México y a las expulsiones masivas está disminuyendo.
El trabajo de las y los progresistas y de la izquierda consiste en mantener la resistencia, mantener la presión y profundizar las grietas. Nuestro objetivo: la caída de Trump… y de su mundo.
17/07/2025
https://lanticapitaliste.org/actualite/international/make-america-great-again-les-premieres-fissures
Traducción: A. Modela
